sábado, 19 de abril de 2014

Inventando la locura

Hoy me siento inventora y te propongo inventar una locura donde sólo quepamos nosotros. Un mundo hecho a nuestra medida, sin ojos que nos observen ni oídos que nos oigan. Un mundo aparte, para ti y para mi, donde las caricias y los besos sean nuestras palabras, un mundo  donde no sepamos donde acaba tu piel y comienza la mía.
Ven, cierra los ojos y dame la mano y caminemos juntos por el filo de lo impensable. Atravesemos la línea de lo prohibido, mirémonos y digámonos todo en silencio.
Silencio. No digas nada. Que nadie sepa que estamos aqui.
Paremos las agujas del reloj con la clara intención de detener el tiempo, arrópame con tu brazos, envuélvete en mi aroma y dejémonos llevar por los latidos acelerados de nuestros corazones. Sin reservas, sin medidas. Háblame entre besos que quiero verme reflejada en tu mirada, enséñame el camino que quiero caminar por cada poro de tu piel, mientras la mía se eriza sintiendo tu aliento en mi cuello. Bésame y soñemos juntos. Hagamos del sueño una realidad, y de la realidad una locura.
Cállate y no digas nada, que las miradas hablen por si solas. Sigamos caminando en lo prohibido. No quiero evitar la tentación, quiero seguir cayendo en ella...
Te invito a inventar una locura donde sólo estemos tú y yo.

martes, 15 de abril de 2014

Tentación.

Después de mucho sin verte apareciste en mi sueño y fue como volver años atrás...
Quise abrazarte de nuevo, volver a ser esa jovencita loca que bebía los vientos por ti, volver a temblar al tenerte de frente. Y pasó...
Y te tuve delante. Retrocedí en el tiempo. Hay algo aun que no ha cambiado y tiemblo. Temblé al sentirte cerca. ¿Qué fue?
Y ante mis ojos te convertiste en la más dulce tentación que nadie pudiese desear. Manzana prohibida y yo respirando en el deseo de morderla. ¿A qué sabe la tentación? ¿Qué sabor tienen los labios de lo prohibido? Un sólo mordisco. Bastaría un solo bocado para saborear la miel de lo deseado.
Y a veces vuelves a mis sueños y me haces viajar al pasado, tal vez al cielo...
Cuando te tengo delante, las palabras se me agolpan queriendo salir todas a la vez, un brillo adolescente ilumina mis ojos y el corazón palpita a ritmos acelerados.
Una vez, solo un viaje a lo prohibido, una tentación irresistible, y una mirada que grita lo que la boca calla. Si tienes dudas, mírame...
Dulce tentación eres, rondando por mi cabeza mientras me autoconvenzo que eres intocable. Préstame tus labios, sólo una vez y envuélveme en tu abrazo mientras juntos, convertidos en uno, traspasamos la línea de lo prohibido.

jueves, 10 de abril de 2014

Amistad en UK

A veces la vida, por circunstancias te cambia y da un giro de 360 grados. Y yo, de buenas a primeras me vi en un país extraño, con una lengua en la que más o menos me defendía y sola. Pero el destino hizo que un día nos encontráramos, tú estabas en mi misma situación. Según tu, me viste y pensaste: "Es española",  yo, hasta que no empezamos ha hablar, pensaba que eras de todo menos española. Y ahí empezó todo, poco a poco nos fuimos convirtiendo en apoyo mutuo, tu con tus cosas, yo con mis calentamientos de cabeza... Pero ahí estabas tú! Ya no estaba sola, y esa amistad que empezó con un "where are you from?" fue creciendo al igual que la confianza.
A partir de entonces son muchos los momentos vividos, muchas risas, muchas conversaciones...
Hoy, yo vuelvo a España, cuando vuelva a UK, tú ya no estarás, habrás vuelto a España.
No sé el tiempo que tardaremos en volver a vernos, ojalá sea poco, pero lo que si sé seguro es que te voy a echar mucho de menos. Gracias por ser mi hombro y a veces hasta mi paño de lágrimas, por reñirme cuando me lo he merecido, por aconsejarme (aun sabiendo que haría lo que quisiera), por escucharme, por animarme en mis días de bajon y, sobre todo, por haber compartido estos meses conmigo. Sé que aunque no nos veamos como antes, esto no acaba aquí. Tú del Norte, yo del Sur, pero la amistad es mucho más grande que la distancia. Que grande eres mi rubia!!! Nos vemos pronto...

miércoles, 9 de abril de 2014

Pero...

Hoy me apetece escribir, a pesar de haber tenido esto aparcado a un lado...
Dicen que la felicidad plena no existe, hoy lo doy por cierto! Estoy feliz, pletórica, mañana vuelvo a mi tierra, con los míos, a los que adoro. Estoy nerviosa, pienso en el reencuentro y mi corazón se acelera. Sonrisa en mi cara.
De repente me doy cuenta que esa sensación de nerviosismo y esas ganas de abrazar y besar a quienes quiero ya la viví años atrás, nervios e infinitas ganas... y de nuevo apareces en escena. Como por arte de magia, como si vinieras a recordarme que existes. Y esa felicidad deja de relucir y ser tan brillante, pues la empaña un poquito la nostalgia. La nostalgia de tiempos en los que verte me hacía olvidarme del mundo y vivía con la ilusión de tu abrazo.
Pero no quiero que la nostalgia empañe la felicidad que siento al poder abrazarte pronto a los míos. Pero siempre hay un "pero" y hoy, sin saber porqué, ese "pero" eres tú. Hoy soy más que feliz y estoy deseosa de estar con los mios. Vivo momentos de máxima ilusión y nerviosismo, pero...

jueves, 3 de abril de 2014

Ven...

Y te reinvento. Una y otra vez. Y busco alguna señal que me lleve de nuevo frente a ti. A tu lado es una utopía.
Y cada día al caer la tarde, cuando mi mente se queda despejada, cansada,  te busca en cada recodo de mis recuerdos, desempolvando momentos vividos que a veces, recuerdo con una enorme nostalgia. ¿Será por que te echo de menos?
Y cierro los ojos y apareces sin esfuerzo, incluso puedo sentir tu abrazo... Puedo oler tu perfume, suave, pero tan tuyo...
Y así paso las horas, tumbada en la cama mirando al techo de mi habitación, donde por momentos parece acompañarme el roce de tu piel... Me embeleso. Pero todo es un espejismo, un éxtasis efímero del que cualquier sonido de la calle me devuelve a la vida real. Y te vas... Desapareces cómo el humo. Te desvaneces mientras ahogo un suspiro. Te quiero, te quiero aquí. Es tan extraña esta necesidad de necesitarte... Son tan verdaderas mis ganas de  sentir tu aliento cerca de mi, de sentirme presa en tu abrazo. Sí, como antes. Como ya fue.
Ven, abrázame, haz que olvide el mundo. No te pediré el cielo, pero quiero llegar a él contigo. Ven y envuélveme con tu piel, ven y quítame este frio tan intenso que me cala hasta los huesos. Este frio que llega a doler. Ven y bésame. Mis labios tienen sed de tus besos y yo, en un solo beso te diré todo lo que he callado. Ven...

martes, 1 de abril de 2014

Quizás sea mi culpa...

Y sé que todo esto es mi culpa.
Quizás sea mi culpa por tener tan buena memoria, que me hace recordar casi con exactitud cada mínimo detalle...
Tal vez sea mi culpa por tener un nombre entre mis labios, enredado con un suspiro. Queriendo salir, ser gritado, pero que se pierde en cada exhalación de aliento. Al filo de ser pronunciado, pero que acaba siendo ahogado por ese suspiro que le impide salir...
Quizás sea culpa mía por no dejarte salir de mi mente, por mantenerte prisionero en mi recuerdo. Recuerdo que a veces me atormenta, pero que a veces me hace sentirte más cerca...
Puede ser que sea culpa mía por ni siquiera intentar hacerle entender a mi corazón que ya no más, que no estás, que te has ido. Por dejar que continúe latiendo al compás de ilusiones que simplemente son eso, ilusiones que jamás serán realidad.
Tal vez yo tenga la culpa de no evitar que las lágrimas broten de mis ojos cuando te echo de menos, cuando me envuelvo en la realidad de tu ausencia, cuando hasta mi eco pronuncia tu nombre...
Y tal vez todo esto que me pasa sea culpa mía por no autoconvencerme que mi piel no te pertenece ya, que tu mirada no busca mis ojos, ni tus ganas buscan las mías.
Y me siento culpable... Culpable de seguir queriéndote, culpable de no encontrar la manera de matar este maldito deseo de tenerte, culpable de buscarte aun sabiendo que no te encuentro.
Culpable de que siempre le ganes a mi fuerza de voluntad para tratar de olvidarte...